Bienvenidos a Su Merced Queridos huéspedes, Nos llena de alegría recibirles y desearles una estancia placentera. Queremos que se sientan como en casa y disfruten de cada momento en esta hacienda con más de 400 años de historia. Cada rincón de Su Merced guarda recuerdos del pasado, cuidadosamente preservados y combinados con detalles que reflejan nuestro cariño y dedicación. Nos hemos esmerado en su decoración para ofrecerles una experiencia única, donde la historia se encuentra con la calidez de la hospitalidad y la belleza de la naturaleza. Esperamos que su visita sea inolvidable y que el encanto de esta casa los acompañe más allá de su estancia. Con aprecio, El equipo de Su Merced

Hacienda histórica en Puembo: donde la tradición y la elegancia se encuentran Imagínese hospedarse en una auténtica casa de hacienda colonial, ubicada en el corazón de Puembo —una zona privilegiada conocida como el jardín de Quito, por su clima templado y su entorno natural de eterna primavera—. A tan solo 18 minutos del Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre, nuestro hotel no solo ofrece una conveniente ubicación, sino también una experiencia profundamente conectada con la historia y la belleza andina. Este exclusivo hotel, emplazado en una hacienda restaurada con esmero, invita a sus visitantes a vivir una estadía única donde el encanto de la arquitectura colonial se entrelaza con el confort moderno. Desde el momento en que cruza el portón de entrada, el visitante es recibido por muros centenarios, jardines frondosos, patios empedrados y una atmósfera que evoca la elegancia de épocas pasadas. Hospedarse aquí no es simplemente pasar una noche: es viajar en el tiempo sin renunciar al lujo, y disfrutar de un espacio donde cada detalle —desde los techos de teja hasta los corredores de madera— cuenta una historia. Es también la puerta de entrada perfecta para eventos especiales, escapadas románticas o estancias culturales, con el valor agregado de estar en una de las zonas más exclusivas y apacibles del Distrito Metropolitano de Quito. Además de su riqueza patrimonial, la hacienda está diseñada para brindar una experiencia integral: desde cenas íntimas en comedores históricos hasta eventos memorables en jardines que respiran tradición. Aquí, el pasado cobra vida en cada rincón, haciendo de cada visita una vivencia auténtica e inolvidable.

Puembo, el rincón de la eterna primavera La Casa de Hacienda Su Merced se encuentra en Puembo, conocido con cariño como “el rincón de la eterna primavera”. Esta pintoresca parroquia, ubicada a tan solo 36 kilómetros de Quito, se ha convertido en uno de los destinos más apreciados para quienes buscan disfrutar de un ambiente sereno y natural, especialmente durante los fines de semana. Rodeado de un paisaje encantador, Puembo ofrece múltiples atractivos para los amantes de la naturaleza. Entre ellos destacan El Molino de Guambi, un paraje natural que alberga una gran diversidad de especies florales; los miradores de los ríos Chiche, Guambi y Guayllabamba, que regalan vistas de ensueño; y la famosa ruta ciclística de El Chaquiñán, que conecta las parroquias de Cumbayá, Tumbaco y Puembo, recorriendo parte del antiguo ferrocarril que unía al norte del país con la Sierra y la Costa ecuatoriana. El encanto de Puembo comienza con su cálido clima y se extiende en la perfecta fusión entre lo moderno y lo tradicional. A tan solo unos minutos de Quito y del aeropuerto de Tababela, este rincón conserva la esencia de un pueblo pequeño, donde la limpieza, el orden y la belleza de sus calles reflejan el esmero de su gente. Cada rincón transmite una sensación de paz, mientras su oferta turística y de actividades crece día a día. En la plaza central de Puembo, el pasado y el presente conviven en armonía: allí, lo patrimonial se entrelaza con lo contemporáneo. Restaurantes que ofrecen comida típica ecuatoriana comparten espacio con bares y locales modernos, creando una atmósfera única. En los alrededores, plazas comerciales y centros deportivos complementan la experiencia con una variada oferta gastronómica y actividades recreativas como pilates y pádel. Puembo es, sin duda, un lugar donde la naturaleza, la historia y la calidez de su gente se unen para ofrecer una experiencia que invita a regresar.